El mundo ya cambió y no hay marcha atrás, así que ¡aprovéchalo!
Quizá esta frase te parezca un lugar común y muy probablemente lo sea, pero no por eso es menos cierta.
Por eso me tomo la libertad de utilizarla, con el único propósito de invitarte a reflexionar un poco -pasados 3 años del inicio de este cambio que nos tomó a todos por sorpresa- sobre cómo a partir de que la vida es otra, nosotros estamos prácticamente obligados a serlo también.
Y eso hablando sólo del ámbito profesional:
¿Por qué digo que es casi una obligación cambiar?
Aquí algunas ideas al respecto.
- Porque hacer las mismas cosas en un entorno distinto es prácticamente imposible, así que más nos vale habernos adaptado e incluso aprovecharlo.
- Porque nadie nos va a esperar a que lo entendamos o queramos hacerlo.
- Porque este cambio significa también una oportunidad de seguir innovando a partir de lo aprendido.
¿Cuántas cosas eres capaz de hacer ahora que ni te imaginabas antes y que además funcionan muy bien?
- Las juntas a distancia con los clientes no son lo ideal, claro, pero, con toda honestidad, te permiten aprovechar mejor el tiempo y a ellos también. Además, ahora puedes tenerlas fácilmente con gente de otros estados y países, con gran facilidad.
- Los ahorros en transporte, comidas fuera y otros, son innegables.
- La posibilidad de dormir y comer mejor es un hecho.
En fin, que una vez superado el peor momento y sin dejar de extrañar varias cosas -al menos para quienes nos sigue significando algo muy importante el contacto directo con la gente-, lo mejor es asumir nuestra nueva realidad y aprovecharla.
Eso sí, sin dejar de lado la importancia de la calidad en el servicio, ámbito en el que me permito hacerte algunas…
Recomendaciones para tus reuniones en línea:
- Conéctate siempre a tus juntas al menos 5 minutos antes de su inicio, de manera que cuando tu interlocutor “llegue”, tú ya estés listo para atenderlo.
- Prepara tus reuniones igual o mejor que antes, con todos los materiales que puedas utilizar y/o requieras compartir (correos, presentaciones, documentos).
- Asegúrate de que el fondo de tu pantalla muestre una imagen de orden y lo más institucional posible.
- Verifica previamente que tengas una buena conexión a internet y evita en la medida de lo posible ruidos y distracciones (sigue siendo una falta de educación estar en una junta y revisar al mismo tiempo tu teléfono celular).
5. Mantén tu micrófono apagado mientras no estés en el uso de la voz.
6. Escucha con atención a tus interlocutores y conserva tu cámara encendida (el contacto visual es tan importante en estas reuniones como cuando son presenciales; quizá mucho más).
7. Evita interrumpir las participaciones de los demás. Si tienes algo que decir, utiliza los recursos que las plataformas ofrecen: levantar la mano u otros.
Espero que estos breves consejos te sean útiles y que, si ya los habías olvidado o los pasabas por alto, los apliques en beneficio de tus interlocutores y de los procesos comunicativos que establezcas con cualquier persona de manera remota.
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